lunes, 22 de julio de 2013

Novos baianos . Acabou chorare (1972)

Imagínese usted: Río de Janeiro, playas, carnaval, samba, color, calor, el Papa Francisco (ah no, eso no). Todas postales que suben la temperatura de uno, tal vez por la envidia (aka calentura) de no poder estar allá disfrutando de una tarde de sol frente al mar. En fin, la vida es injusta cuando notas que ellos van a tener el mundial, los juegos olímpicos y para colmo, lo mas importante, no tienen este frío que penetras los huevos de mi Buenos Aires querido. Entonces es ahí cuando dan ganas de ir a matarlos a todos, pero no se puede, primero porque uno está en contra de la violencia, segundo porque los Argentinos, por más disputa que tengamos, amamos (o al menos respetamos mucho) a los Brasileros y tercero y principal, porque ellos son muchos más que nosotros.

¿Entonces qué se puede hacer para matar el frío? se preguntarán y les digo: se puede prender la estufa, el aire acondicionado (si es que sos mas moderno -o rico-), una hornalla. Se puede abrigar mas al punto de convertirse en un ser con menos movilidad que la cara de Zulma Lobato. Se puede uno tirar en la cama y taparse hasta los ojos (excluyendo estos, sino se complicaría ver el televisor). Se puede tomar un baño de agua caliente o tomar una sopa, café, té o cualquier infusión caliente. También se puede agarrar el lanzallamas y echarse una manguereada.

Pero también se puede hacer algo mas sano, divertido y, por sobre todo, más barato, tanto que es gratis. Un método diferente para pasar el frío y disfrutar de la vida al estilo brasileño es bailar. Pero bailar sin música es para aburridos y/o locos (y si bien estamos un poco locos preferimos, al menos en este caso, bailar con música de fondo) por eso les traigo un poco de samba, un poco de alegría que nau tem fim. Con ustedes, los desconocidos pero no menos interesantes Novos Baianos.




Acabou chorare

No hay comentarios:

Publicar un comentario